aikidoyoga

En mi tardía iniciación en el mundo del Aikido hace tres años, ahora tengo 44, no tardé en practicar yoga, con un poco de curiosidad y como complemento a mis clases de Aikido, practicamente consideraba el yoga como una serie de estiramientos que me vendrían bién. Al avanzar en mi práctica de yoga no sólo lo veía como algo complementario sinó como una verdadera continuación de mis clases de Aikido, practicaba la calma, serenar la mente, el centro, el equilibrio, el poder respiratorio, estiramientos, resistencia etc. Con estos argumentos un día navegando por internet accedí a una página de Aikido en la que se proponía un fusión de estas disciplinas y no trabajarlas por separado sin perder en ningún momento las enseñanzas originales de Morihei Ueshiba, al contrario enriquecerlas con los benefios de ambas ya que de una manera pragmática facilitan el crecimiento personal tanto en aspectos físicos, mentales y emocionales de una manera estructurada. El grupo de aikidokas que siguen esta línea

Este artículo pertenece a Damián un compañero practicante de aikido y yoga, en el que realiza una síntesis sobre autocontrol BASES DE AUTOCONTROL 　 　 1- AUTOCONOCIMIENTO Debemos conocer nuestros propios actos negativos como la cólera, la impaciencia, los celos, el miedo. Para ello debemos cazarnos cuando surjan. Para aprenderlos a reconocer debemos observarnos durante el día siendo más conscientes de nosotros mismos, de nuestros procesos internos. 2-AUTOSUGESTIÓN Debemos persuadirnos cada mañana y cada noche de que PODEMOS ser dueños de nosotros mismos. Para dominar los sentimientos se requiere dominar previamente los pensamientos o ideas y después los actos. Nosotros actuamos según las ideas que tenemos dentro. No son las causas externas las que despiertan nuestro temor, ira, tristeza, etc.; sino la idea o pensamiento que nuestro “yo” se hace respecto a la circunstancia y al grado de DAÑO o AMENAZA que creemos suponer para nosotros. Por ello debemos tener pensamientos POSITIVOS. La